Hoy toca uno de esos post en los que os presentamos a una de nuestras últimas incorporaciones. Se trata de Mi Marmita, una cocina de comida preparada que elabora de forma artesanal unos platos caseros para chuparse los dedos. Si quieres conocer más sobre nuestro nuevo socio, sigue leyendo.

Mi Marmita es una cocina que nace en la Sierra de Guadarrama, rodeada de un entorno rural, encinares y pinares, que no solo inspiran para la creación de nuevos platos sino que dan el clima perfecto para la elaboración de comida sana y natural. Para elaborar sus platos, Mi Marmita utiliza ingredientes y productos frescos de la zona, fomentando la producción y el consumo local. 

Marichu es la encargada de este proyecto tan especial. Es ella quien elabora con cariño y esmero toda esta comida tan especial y casera. Cuida a conciencia los ingredientes que añade a cada uno de sus platos para que todos ellos sean sanos y naturales. 

Hay tres hechos que hacen a la cocina de Mi Marmita especial y diferente:

• En primer lugar, se trata de una cocina baja en sal que utiliza únicamente aceite de oliva virgen extra. Las comidas bajas en sal suelen recomendarse para los enfermos cardiacos ya que una reducción del consumo de sal contribuye a disminuir el riesgo de problemas del sistema circulatorio. Pero no pienses que por carecer de sal, los platos carecen de sabor. Utilizan otros métodos para aderezar como salsas o especias. Por otro lado, el aceite de oliva virgen extra (AOVE), es uno de los más sanos y ricos en propiedades, aportando grasas de calidad que nuestro cuerpo necesita. Además es producto nacional. 
• No necesita cadena de frío, pudiéndose almacenar en cualquier lugar. Esta es otra de las novedades de Mi Marmita. A diferencia del resto de tuppers caseros que puedes encontrar en Que Cocine Peter, los de esta cocina no necesitan refrigeración. Puedes almacenarlos en una despensa normal y corriente con todas las garantías de su buen estado de conservación.
• Por último, hay que destacar que los tuppers de esta cocina no son de plástico como suele ocurrir con este tipo de servicios. En lugar de este material, utilizan cristal para envasar sus elaboraciones. Esto demuestra que se trata de una cocina comprometida con el medio ambiente, con la reducción del consumo de plástico y que apuesta por materiales reutilizables como el plástico, que puede tener una vida útil muy larga.

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